12 feb 2009

de este asunto absurdo de ir creciendo

una pagina en blanco parece ser todo mas adelante, voy escribiendo.

Puede que un ron y una buena charla te vaya convenciendo de ser artista de fin de semana, de aceptar un horario de oficina y soñar con tu casa en San Isidro, puede que la edad te consuma las ganas y las fuerzas se vayan apagando, como velas misioneras sin santo.

Supongo que es parte de ir creciendo, postergar tus sueños hacia los ilusorios nietos, y de un momento a otro , sin darte cuenta , ya eres grande, ya vives solo , ya tienes cuenta de débito y haces todo lo que tu jefe dice... todo por tu deposito de fin de mes. Yo digo: que extraña forma de ser feliz, que sutil forma de ser esclavo, si conocer a mis hijos el fin de semana es necesario, ¿de que vale tener un carro del año en la puerta?, si matar el ingenio, para resucitarlo con un propósito corporativo es la idea, ¿para que diablos se pinta un cuadro?

Pero en el fondo entiendo, sé que ese es el camino correcto, que ser libres no es mas que un concepto, y que la vida no es siempre un sueño.

Escribo estas lineas cargado de un extraño resentimiento, algo no me parece justo en todo esto, pero de engaños y entuertos se hacen las verdades generales, al menos eso quiero creer. Así que no me queda de otra que dibujar hombres con paraguas y decir que ser perfeccionista es mi mayor defecto.

7 feb 2009

La Tácita

¿en que recuerdo te escondes?
para buscarte y besarte escondido
ahí donde nadie nos sabe
mas que una vela en un cuarto perdido

¿de que peligro me guardas?
si de tu boca a la gloria
mil derrotas o mil victorias
aun lejos tus besos me salvan

¿de que vicio te aferras?
para dejarme esperando con ansias
que oscuros secretos albergas
tus misterios o mis propias circunstancias

¿en que sutil pensamiento?
habitas como clavada
fundida, confundida y entrelazada
latiendo conmigo a gritos encubiertos

6 feb 2009

A mi tiempo

A mi tiempo cada cosa toma su simple forma,
se devuelven las gracias prestadas ,
y se perdonan las ofensas,
compramos los boletos de regreso
y nos damos un apretón de manos solemne,
así debe ser estar loco de remate
cuando por dentro el corazón late
y la demencia se ausenta,
como de los chocolates que bien me supiste dar,
algo menos de lo esperado ,
pero nunca me supe esperar,

ahora si cada cosa va en su estimado lugar ,
dando brincos se alejan las palabras
y de alegrías o sin sabores ya nada habla,
de poesías que fuiste matando ,
de largos caminos con sus estrechos barrancos
de milongas que solo yo sabia escuchar,
de monedas en bolsillos rotos,
de amarguras que saben bien ,
de aquellos antes de uno ,
y los que vienen después de uno también.

así , a mi pequeño tiempo ,
una eterna e imposible amistad,
una descolorida agonía ,
unas fantasías perdidas ,
cada cosa, cada pequeña cosa a su lugar.